Este comienzo de año 2023 empezó bien para la Casa Blanca, gracias al espectáculo de los desamores republicanos, durante la elección del altavoz en la Cámara de Representantes.
El lunes 9 de enero, una revelación ha comprometido sin embargo este pase favorable. Según el canal CBS, el Ministro de Justicia, elProcurador General Merrick Garland, ha designado a un magistrado para examinar los documentos, algunos de los cuales son clasificados, encontrados en las instalaciones del Centro Penn Biden para la Diplomacia y el Compromiso Global. Se trata de un think tank inaugurado por el presidente antes de su elección, adscrito a la Universidad de Pensilvania. Estos documentos datan de cuando Joe Biden era vicepresidente de Barack Obama (2009-2017). No sabemos ni el curso, ni el grado de clasificación, ni el contenido. Pero este caso llega en el momento adecuado para los republicanos, quienes inmediatamente lo aprovecharon.
Joe Biden ocupó este local entre mediados de 2017 y la primavera de 2019, cuando lanzó su campaña presidencial. Entre los exejecutivos del centro se encuentran Steve Ricchetti, asistente del presidente en la Casa Blanca, y el secretario de Estado Antony Blinken.
Estos documentos fueron identificados el 2 de noviembre de 2022 por los abogados personales del presidente, una semana antes de las elecciones intermedias. Se revelaron en un gabinete cerrado, que hubo que vaciar para liberar espacio de oficinas, explicó en un comunicado de prensa Richard Sauber, asesor especial de Joe Biden.
Ese mismo 2 de noviembre, la Casa Blanca alertó a los Archivos Nacionales, que al día siguiente tomaron posesión de ella e informaron al Departamento de Justicia. En el proceso, Merrick Garland solicitó a un magistrado designado por Donald Trump, John Lausch, fiscal del distrito norte de Illinois, que examinara los documentos en cuestión. A él le corresponderá considerar, o no, las posibles consecuencias.
Los republicanos mantienen terreno para la venganza
Por lo tanto, los procedimientos se habrían respetado escrupulosamente desde el descubrimiento, sin embargo, sin plantear todas las preguntas sobre los años que advirtieron. La Casa Blanca quiso mostrar su deseo de cooperación inmediata con los Archivos Nacionales, para enfatizar el contraste con el comportamiento de Donald Trump. Este último está en el centro de una investigación federal debido a la incautación de una gran cantidad de documentos clasificados, en agosto de 2022, en su residencia en Mar-a-Lago, Florida. El expresidente comentó de inmediato sobre la vergonzosa revelación para su sucesor el lunes. «¿Cuándo el FBI [la police fédérale] ¿Hará una redada en las muchas residencias de Joe Biden, y posiblemente incluso en la Casa Blanca? » escribió en su red, Truth Social.
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